lunes, 12 de marzo de 2012

Ejércitos de moral.

 

Existe una gran diferencia entre tú y yo,  y es que a mi se me hace eterno,
se me hace duro el mas ligero movimiento en contra.
Desgraciadamente, no sé seguir tus pasos sin perder la dignidad,
esa misma que tengo de oferta de lunes a jueves, la misma que ofrezco en
sacrificio a sabiendas de que, perdida ya la batalla....
no hay retirada que valga la pena.


domingo, 12 de febrero de 2012

Hacia el Oeste

Desde el principio sabía que Alicia confundía la forma de indicar el camino, la conocía.
Después de un tiempo con una idea equivocada sobre la derecha y la izquierda, decidió fijar su rumbo de oídas, intuyendo, dando rienda suelta a su libre albedrío.
Decidió pues que en lo que le quedaba de vida, envejecería alegremente.

Yo, sabía que mirándome a través de sus ojos, sería como un reflejo en el espejo de mi yo del futuro, el hombre que llegaría a ser.
La admiraba y ella lo sabía, me conocía.

Del mismo modo, Alicia evolucionaba mediante admiración a otras personas, entre ellas yo. Con lo cual no tenía sentido para ella conocer el camino correcto, sino seguirlo.
Si el sonido de una melodía le llamaba, hacía una pausa para captar todo lo que le evocaba, y así infinitas veces, infinitos días.

Era feliz tanto en una cena de locos como en una fotografía con un sombrero nuevo.
No le importaba demasiado la sociedad, se conformaba con escribir poesía en su madriguera.
Acostumbrada a ir en contra de las reglas del juego prefería los gatos a los perros, y se cuidaba demasiado de no perder el tiempo.


***


Escapaba de la realidad y de la dureza del puro conocimiento, nunca llegó a entender el hecho de que la vida se midiera en traumas. No recordaba marcas de felicidad con tanto peso.
Resolvía entonces mirar hacia otro lado cuando se le mostraba una cara verdadera, intentando que la luz no la cegara, fijando su mirada en las estrellas.
De esta manera vivía en su propia prisión, no sin darse cuenta.


***

Era amor verla dormir, cada noche me citaba con su abrazo y sentía deseos de devolverle el aire.
En estos momentos era presa de sudores y jadeos, algo alteraba su sueño.

-" Soñaba que volvía a el Este, cuanto más intentaba alejarme, más cerca lo tenía, me sentía una niña perdida, corría y corría sin sentido común, tropezaba y caía sobre mi decisión de mirar al frente, no sonreía, no podía. Tampoco lloraba curiosamente, de repente crecía como me encogía, presa del mal camino donde me habían expulsado, sin más emoción que una vaga nostalgia hacia el Oeste.

Una voz me llamaba....Alicia es por aquí, mientras el tic-tac de un reloj apuraba los minutos para mi propio entierro, deslumbrada por el haz de luz, tuve la leve sensación de ver un conejo, corrí tras él mientras el suelo a mis pies se convertía en un embarrado sendero, cada vez más pequeño, una madriguera luego, un pensamiento ( he vuelto).
La luz se hizo intensa y ya más no recuerdo. "

Tranquila mamá, sólo ha sido un sueño.


***








Para Alberto Pizarro.


lunes, 16 de enero de 2012

Yerro

Sábado 11 de abril de 2009


Pase a estas páginas vírgenes,
es sólo porque lo sé,
se escucha el latido prendido en la hoguera,
la puerta está abierta aunque...
espera...
debe estar prohibido,
es de intuir por el olor de su delgada silueta.
Es sólo porque lo sé.
Pagar la deuda no transciende en lo ya perdido.
Lo mismo dá, lo permitido...
no huele igual.
Me propongo errar.



viernes, 13 de enero de 2012

Tu, yo, tras.

Domingo 2 de noviembre de 2008



He vetado tu puerta,
que no siendo mía.
He golpeado clavos
en tu cerrojo.
He amordazado mis manos,
por si sueltas la veda....